Consejos para elegir un cerrajero de confianza y eficaz

En cualquier momento puedes requerir de los servicios de un cerrajero, por ello, saber elegir al mejor es cuestión de buscar, de conocer la información sobre su trabajo, las valoraciones de otros usuarios y la calidad general de sus actuaciones.

Las razones por las que podrías necesitar un servicio de cerrajería pueden ser muy variadas, bien para una reparación o mantenimiento planificado de una cerradura, o bien por una urgencia por el mal funcionamiento -inesperado, como siempre- o porque te hayas dejado las llaves dentro de casa y no tengas manera de entrar. Aunque las razones puedan ser variadas, la forma de elegir un cerrajero no varía, y es siguiendo consejos como los que a continuación leerás.

Valora positivamente la disponibilidad

La disponibilidad no es otra cosa que la capacidad de un cerrajero para llegar hasta dónde estés, de poder atenderte debidamente. En ese caso, ejemplos como el de una empresa de cerrajeros en Pamplona, con un servicio 24/7, seguro que será una elección acertada, ya que las urgencias de cerrajería ocurrirán cuando menos lo esperes, porque suelen ser inesperadas. Por eso vas a requerir de un servicio que pueda asistir a tu domicilio con la rapidez que el caso necesita, un buen cerrajero estará allí en cuestión de 30 minutos, y debe ser accesible para contactar.

Precios cerrados y todo por escrito

Los precios cerrados son más importantes de lo que crees. Cuando solicitas la ayuda de un cerrajero, sobre todo para un servicio que tienes certeza de lo que será, como reemplazar una cerradura, un bombín, abrir una puerta, etc…, debes poder pedir un presupuesto por anticipado, o si tiene página web, debe mostrar las tarifas al menos de forma orientativa.

Suele generar incomodidad que al finalizar el trabajo, la tarifa del servicio realizado te tome a paso cambiado, como una sorpresa desagradable, porque imaginabas un coste más barato. Ese mal recurrente se elimina buscando un buen cerrajero que, además de disponible, sea claro con sus precios desde antes de llegar a tu domicilio.

Luego está el hecho de los contratos y garantías. Aunque se trate de un servicio sencillo, el cerrajero trabaja en un sector tan elemental como la seguridad de tu patrimonio. Cualquier fallo, servicio mal realizado u omisión, conlleva riesgos que pueden ser desde un robo, producto de una cerradura que no cumplió su función, hasta un nuevo atasco del mecanismo en un corto plazo.

Esos riesgos se minimizan cuando existe un acuerdo de garantías entre las partes. Y mejor si es escrito, porque podrás utilizarlo para reclamar en caso de que sea necesario.

Experiencia y valoraciones

Si nunca has contratado a un cerrajero, conocer su experiencia significa basarse en la cantidad de años que llevan en el oficio. Sin embargo, esa no debe ser la única manera -tampoco es la más acertada- de encontrar al cerrajero más capaz y más eficaz para llevar a cabo las tareas que le encomiendes.

Es ahí donde las valoraciones de otros usuarios son de utilidad. Desde amigos y conocidos que hayan utilizado estos servicios y puedan recomendarlos, hasta servicios de valoraciones digitales que te permitan encontrar al proveedor adecuado para servicios de cerrajería.

En este sentido, intenta siempre encontrar puntos comunes entre las valoraciones anteriores y el problema que ahora tengas.

Otra manera más rápida de valorar la experiencia de un cerrajero es contactando directamente: el caso es llamarle o enviarle un mensaje, de manera que le puedas contar tu problema. Cuando la experiencia es muy alta lo notarás enseguida, porque la mayoría de los cerrajeros conocen el funcionamiento de los mecanismos más comunes sin ni siquiera tenerlos en frente, y en algunos casos, podrán brindarte herramientas y consejos para solucionar tus problemas sin ni siquiera ir hasta tu domicilio.

La cerrajería es un arte y un oficio complejo. Algunos tienen más experiencia, otros una capacidad innata para desarrollar sus labores, en todo caso, encontrar al servicio adecuado de cerrajería para que te ayude es una cuestión de probar, de dejarse recomendar por personas que hayan tenido que sortear problemas similares, y de dejar todo debidamente por escrito, tanto en precios como en garantías, por si acaso. Así tendrás más tranquilidad.