Los mejores consejos para adelgazar con el yoga
Existen muchas técnicas y métodos para perder peso y conseguir un cuerpo tonificado, pero ninguno trae consigo los beneficios adicionales que proporciona el yoga al cuerpo y a la mente.
El yoga es una práctica que surgió en la India, donde se logra crear un balance entre el cuerpo y la mente. Está considera como una de las maneras de ejercitar el cuerpo más completas que existe, y por ello es ideal para adelgazar. En tal sentido, hoy hablaremos sobre los consejos de la Guiafitness, donde se develan los secretos de esta práctica para lograr un cuerpo esbelto y súper sano.
Y es que el yoga es algo más que relajación y meditación, pues las posturas que se realizan durante las sesiones trabajan diversos músculos del cuerpo que se van tonificando. Asimismo, te enseñan a focalizar tus energías en ciertas zonas de tu cuerpo, para trabajar directamente sobre ellas, dándoles estabilidad y fortaleza.
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¿Por qué el yoga ayuda a perder peso?
Muchas personas creen que el yoga solo se trata de meditación, pero lo cierto es que sus beneficios también se extienden a la parte física, y uno de ellos es la eliminación de las grasas acumuladas y conseguir el peso adecuado. Pero, ¿cómo se logra?
Para empezar, con el yoga tonificarás los músculos, y mediante las posiciones se dirigen las fuerzas a las partes del cuerpo donde se acumula más la grasa. Igualmente, aprendes a respirar correctamente ayudándote en la circulación de la sangre.
Por otra parte, es beneficioso en los procesos digestivos gracias a los movimientos que se realizan, con los cuales se aprovechan mejor los nutrientes contenidos en los alimentos, acelera el metabolismo y a su vez impiden la deposición de las grasas. Del mismo modo, mediante los ejercicios de respiración y relajación, es posible disminuir el estrés y la ansiedad, así como fomentar la concentración y regularizar el sistema nervioso.
El complemento del ejercicio
Como todas las disciplinas deportivas y los ejercicios para bajar de peso, es necesario complementarla con una dieta especial, para ello lee más aquí en donde te explicarán los preceptos de los practicantes del yoga. En tal sentido, ellos creen que todo aquello que procede directo de los elementos de la naturaleza (sol, agua, aire y tierra) tienen un gran contenido de nutrientes y son más saludables, en comparación a los que no surgen de ella.
Igualmente, prefieren siempre crear comidas variadas y simples, donde predominen los productos frescos y vegetales. Los únicos ingredientes que recomiendan de origen animal son los lácteos y la miel; mientras que se intenta evitar el consumo de alimentos muy salados, agrios, amargos, picantes, secos, de sabores muy fuertes o que estén a temperaturas muy altas.
Del mismo modo, al practicar esta disciplina la actitud relajada y positiva debe trasladarse también al momento de comer, en donde al sentarse lo primero que se hace es presentar los agradecimientos por los alimentos que se van a consumir y por las manos que los han elaborado. Asimismo, debes comer despacio, saboreando y masticando bien cada bocado, para propiciar una digestión correcta.
Y muy alejado de lo que estás acostumbrado a creer, en el yoga no se come hasta quedar súper saciados, sino que implementan el principio del estómago medio vacío, en donde solo llenan la mitad con comida, un cuarto del estómago con agua y el restante quedaría libre.
Las posturas que más ayudan
En el yoga hay muchas posturas diferentes en las que se mueven diversos músculos. No obstante, hay dos en particular que tienen una acción más inmediata en la quema de grasa. Esas son la asana de la cobra, el que se trabaja el abdomen, los glúteos, muslos y los músculos de la espalda; y la asana del guerrero, en donde se integran las dos partes del cuerpo (posterior e inferior) y se crea un equilibro en la zona abdominal que lo fortalecerá.
Bien sea para adelgazar o para encontrar un equilibrio entre tu cuerpo en tu mente, el yoga es puro bienestar. En tal sentido, intégralo en tu rutina y comienza a gozar de sus múltiples beneficios.