Mastín Español: Características, temperamento y consejos de cuidado
El mastín español es poseedor de un carácter afectuoso y amigable, lo cual lo ha convertido en una raza muy solicitada para familias numerosas. Es un excelente guardián y tiene muchas otras virtudes que conocerás en las siguientes líneas. Se cataloga como una raza de perros gigantes su origen es totalmente español.
Si estás en proceso de adoptar un cachorro de esta raza, te conviene saber un poco más sobre su temperamento, consejos para educarlo y cuáles son los cuidados necesarios para brindarle una vida plena, saludable feliz.
Contenido
Origen
Esta raza fue originalmente utilizada como perro guardián de ganado. Se trata de un perro de pastoreo semi-nómada, utilizado por los pastores para la protección del ganado ante los depredadores.
Características físicas de la raza les permitía salvar al ganado del ataque de los lobos, de modo que fue utilizado en fincas, acompañando a rebaños de ovejas al norte de la península ibérica. Los perros mastín español actuales logran mantener estas cualidades, de ahí que sean excelentes protectores del hogar y la familia, aunque necesita un carácter firme, porque no es el mejor obedeciendo las órdenes.
El mastín español es un perro cuyo origen es propio de la región ibérica y por tanto está muy enraizado, tanto a nivel cultural como histórico. Se trata del perro de guardia tradicional de los rebaños trashumantes, encargado de defender a estos de los depredadores y al cual se colocaban carlancas, que son collares metálicos con pinchos que les servían para protegerse de los lobos.
No se debe confundir con un perro ovejero, ya que el mismo no se encarga de pastorear ni conducir los rebaños, como otras razas. Su gran tamaño, se les llama “molosoides” o “tipo moloso”, de ahí que se hayan utilizado como una línea de defensa, ya que además de grandes, son fuertes, musculosos y con marcada tendencia a proteger.
A lo largo del tiempo ha recibido diferentes nombres como: mastín leonés, mastín extremeño, mastín castellano, mastín español gigante. En la actualidad, todos los subtipos de razas se han mezclado y se encuentran extendidos por la Cuenca Mediterránea y Asia Occidental.
Carácter de un mastín español
La lealtad y la nobleza son dos de los rasgos de carácter fundamentales en un mastín español. Deberás saber que no es el perro más dado a demostrar cariño, pero su amor es tan grane e incondicional, que puede llegar a dar su vida para defender la integridad física de sus amos en momentos de peligro.
No es un perro que se caracterice por hacer escándalos y ladrar demasiado, pero si tiene la particularidad de babear mucho y roncar. Como buen guardián, resulta excelente compañero de juegos para los pequeños y es muy hábil para aprender nuevos trucos. Lo único que se ha de tener en consideración, es el hecho de que tienen un gran tamaño y son perros muy fuertes, por lo que es necesaria la supervisión al momento de jugar, ya que de manera involuntaria podría lastimar a los niños pequeños con algún movimiento.
El mastín español es un perro con una personalidad independiente y es muy seguro de sí mismo, de tal modo que le gusta la libertad y no es el mejor acatando órdenes. Cuando es cachorro, necesita de un amo firme que le de una educación estricta y marque una línea de respeto entre amo y mascota, sin lastimarle.
De lo contrario, tendrán un adulto desobediente y malhumorado. Siendo el mastín español un perro muy inteligente, no le será difícil tomar sus propias decisiones, de hecho, tiene una gran capacidad de resolución de problemas, de ahí que quiera siempre hacer su voluntad cuando están bajo la tutela de un amo permisivo y de carácter blando.
Características físicas del mastín español
Como ya mencionamos, el mastín español es un perro de gran tamaño y simple vista su presencia es poderosa. Tiene una figura bien proporcionada, con extremidades musculosas. Los machos tienen un pero que va de 50 a 70 kg mientras que las hembras, de 40 a 60 kg y con una altura cercana a los 70 centímetros.
Hay dos variedades o subtipos de mastín español: el pesado, que es común al norte de España y uno más ligero, que se caracteriza por ser esbelto, más ágil y atlético. Tienen una mandíbula fuerte, cabeza grande y papada justo debajo del cuello, lo cual es un rasgo característico de esta raza. Es un perro elegante y fuerte, pero no muy esbelto.
Otra característica peculiar de esta raza, es su espolón en las patas traseras, un rasgo que comparte con el Perro de Montaña de los Pirineos. Es de ojos pequeños, lo cual le permite mostrar una mirada relajada que en ocasiones resulta muy engañosa, porque se trata de un animal que permanece en estado de alerta.
Tiene orejas grandes, puntiagudas y relajadas, las cuales caen a los lados de su cara. En cuanto al pelaje, el mastín español posee un pelo corto, grueso y liso, el cual es superficial. Debajo de esta capa, existe otra que es lanuda y que se pierde con la llegada del verano. En cuanto a color, puede ser rojo, gris, amarillo, negro o leonado, pero en general es amarillo con manchas negras de forma atigrada.
Cuidados necesarios para esta raza
Es un buen perro para familias ocupadas o personas con poco tiempo disponible en su rutina diaria, ya que el nivel de actividad de un mastín español es muy bajo. Con una rutina de ejercicio y juego que resulte moderada, tienen lo que necesitan para sentirse bien. Un paseo al día puede ser suficiente para ellos, siempre que el paseo sea entretenido.
Aunque su carácter dócil y su poca necesidad de actividad física sean asuntos muy convenientes, es necesario aclarar que no son aptos para casas o departamentos pequeños. El sitio ideal para esta raza es una casa que cuente con jardín o patio trasero y no hay problema con que permanezca al aire libre, porque su pelaje de invierno le protege de las bajas temperaturas y también ha aprendido a adaptarse al calor, siempre que tenga agua y techo a disposición.
Su cabello debe ser cuidado con atención. Es necesario cepillar el cabello del mastín español de forma regular, sobre todo con la llegada del otoño que es el momento en que se desprende de su pelaje invernal y se prepara para el verano.
En general, deben seguirse ciertas pautas de cuidado:
- Baño una vez al mes.
- Ejercicio moderado diariamente. Debido a que cuenta con mucha energía, cualquier clase de actividad física estará bien.
- Alimentación equilibrada, basada en piensos especialmente diseñados para perros de razas grandes y en cantidad justa, para evitar que sufra sobrepeso.
- Desparasitación interna y externa a lo largo del año.
- Cepillarlo con regularidad.
- Llevarlo anualmente al veterinario y mantener al día sus esquemas de vacunación.
Cuidados de salud
La expectativa de vida de un perro mastín español es de 10 años, pero aplicando los cuidados correspondientes y con la suficiente dosis de afecto, se puede extender su periodo de vida incluso hasta llegar a los 18 años, como ha ocurrido con casos específicos de perros que llegan un régimen nutricional bien planificado, actividad física y satisfacciones emocionales.
Para alargar la vida de un mastín español es necesario proporcionarle todos los cuidados pertinentes en aspectos clave como: alimentación, vacunas, desparasitación, ejercicio y afecto. La salud emocional de la mascota es tan importante como los demás asuntos, porque de su estado de ánimo depende parte de su comportamiento y desarrollo en el núcleo familiar.
Intenta proporcionarle una cama cómoda, de manera que se convierta en su refugio dentro de casa y de esa manera pueda convivir con el resto de la familia durante sus actividades diarias. A pesar de que pueden soportar las temperaturas altas, deberás evitar que se expongan por demasiado tiempo a los rayos UV, ya que resultan perjudiciales para su salud.
Enfermedades más comunes
Esta especie canina es especialmente sensible a ciertos problemas de salud, los cuales indicamos a continuación para tenerlos en cuenta y realizar labores de prevención.
- Cáncer. Se estima que el 85% de las muertes de esta raza se deben al cáncer, tanto en huesos, piel y órganos reproductores. La recomendación principal para evitar este padecimiento, es la esterilización a temprana edad.
- Displasia de cadera. Se trata de algo habitual en perros de razas grandes, pero en el caso del mastín español parece prevalecer, debido a que tiene un crecimiento acelerado luego que abandona su etapa de cachorro.
- Problemas oculares. La irritación ocular y cualquier otro padecimiento, son relativamente normales y no hay que alarmarse, solo atender adecuadamente para evitar cualquier clase de complicación que pueda producirse.
La alimentación es otro de los asuntos que más atención requiere cuando se es poseedor de un mastín español, principalmente porque una alimentación inadecuada puede ser imán para las enfermedades y el desequilibrio alimenticio puede causar obesidad o desnutrición, según sea el caso.
Los cachorros son destetados en torno a los dos meses de vida, y en el calostro de la madre conseguirán los nutrientes y defensas necesarias para su supervivencia. Una vez termine su etapa de cachorro, comienza a duplicar su tamaño de manera rápida y es por ello que necesitarás multiplicar los nutrientes de su dieta.
En su edad adulta, tendrás que cuidar las porciones de alimento que le entregas, prefiriendo calidad antes que grandes cantidades. Esta raza es grande y por tanto tiene altos requerimientos alimenticios, pero eso se logra con un pienso nutritivo en la cantidad justa.
Agua fresca luego del ejercicio y sobre todo en épocas de calor es un asunto importante, porque por su pelaje y tamaño, le cuesta un poco dispersar el calor, y un golpe de calor puede llegar a matarlos.
¿Cómo educar a un Mastín Español?
La obediencia en un mastín español es un asunto que ha de tomarse con la suficiente determinación, porque de ello depende el correcto desenvolvimiento de la rutina diaria familiar y la felicidad del animal.
Entrenar a un perro de esta raza es un reto. El proceso debe iniciar desde cachorros y el dueño necesita de altas dosis de paciencia, porque el mastín español es de naturaleza desobediente, con la particularidad de padecer “sordera selectiva” y no acatar algunas órdenes a voluntad, lo cual se debe a su inteligencia y la independencia que los caracteriza.
Lo primero que se necesita, es un amo seguro de sí mismo, de sus capacidades y habilidades y que tenga la suficiente fuerza para imponerse como jefe. Es el amo quien tiene que imponer los límites y establecer las pautas de comportamiento que regirán la relación, algo que debe hacerse desde temprana edad.
Luego de superada esta etapa y teniendo un liderazgo bien marcado, entonces podremos comenzar a sacar provecho a inteligencia y la gran capacidad de aprendizaje del mastín español. Esta raza tiene la particularidad de aprender trucos de manera rápida, de modo que puedes enseñarle comandos de entrenamiento.
Te conviene no aburrir al perro, ya que tienen a mostrarse malhumorados con facilidad cuando se los expone a una rutina diaria estresante y sin novedades. Para evitar el desinterés, intenta que los entrenamientos sean divertidos, principalmente al aire libre. Recuerda que esta raza no es apta para espacios pequeños ni casas que carezcan de área de jardín o patio.
La socialización es otro asunto que no se puede obviar y debe ser llevada a cabo desde una edad temprana. Se necesita adiestrar al mastín español para que sepa cómo debe comportarse ante diferentes situaciones de la vida diaria, como las visitas al hogar, la visita a nuevos lugares y la interacción con otros canes.
Lo ideal será que se aplique un adiestramiento positivo que tenga como base la entrega de recompensas.
En general, esta es una raza que no presenta mayores inconvenientes de salud siempre que cuente con los cuidados adecuados y con la crianza correcta y las atenciones físicas y emocionales necesarias puede disfrutar de una vida larga y saludable.