El ácido hialurónico, sus propiedades como agente cosmético y de salud
El verano es una época del año en la que la piel sufre mucho desgaste. Las altas temperaturas invitan a desvestirse y lucir más carne, pero esto puede tener como consecuencia una mayor exposición de la piel a agentes externos como los rayos de sol, el salitre de la playa, la deshidratación, etc.
Y tras el verano, llega el frío, que aunque la piel se exponga menos a las bajas temperaturas, estas pueden producir sequedad y hacer que pierda elasticidad. Durante todo el año es recomendable utilizar productos cosméticos para su cuidado y atender las indicaciones de los dermatólogos en caso de sentir molestias o notar un envejecimiento acelerado.
En el mercado de productos cosméticos y de salud encontramos muchos productos que ayudan a reparar y conseguir un mejor estado de la piel, y uno de ellos es el ácido hialurónico, muy conocido por sus potentes propiedades.
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Qué es el ácido hialurónico y cuáles son sus propiedades
A la pregunta de que es el acido hialuronico la respuesta más correcta sería de la de que es una sustancia que se encuentra de manera natural en muchos tejidos y órganos del cuerpo humano, entre ellos la piel. La propiedad más relevante de esta sustancia es atraer y retener el agua, de modo que es un agente hidratante por sí mismo. Esto permite que los tejidos se mantengan en buenas condiciones.
En el proceso de envejecimiento, que es un proceso totalmente natural y que sufrimos todos cuando vamos acumulando años, el ácido hialurónico disminuye en el organismo y la piel va perdiendo hidratación, abriendo la puerta con ello a la aparición de arrugas y la flacidez.
En el sistema óseo, las articulaciones también van perdiendo ácido hialurónico y esto produce que los cartílagos se vuelvan más rígidos, causando dolor por el roce entre huesos. Una vez cumplidos los 50 años, en el organismo queda la mitad del ácido hialurónico que existe en su concentración máxima.
Si bien las propiedades del ácido hialurónico se conocen desde siempre, su capacidad para atraer y retener el agua lo ha convertido en un producto imprescindible en la industria cosmética y la medicina estética, así como en terapias de medicina regenerativa y traumatológica.
Los médicos, especialmente los dermatólogos, recomiendan utilizar ácido hialurónico a partir de los 30 años para mejorar la hidratación de la piel, aumentar la producción de colágeno, reducir el total de arrugas y el envejecimiento de la piel, lubricar las articulaciones, facilitar la movilidad de las células y cicatrizar heridas, entre otros procesos.
En la industria cosmética, importantes marcas del sector, como es el caso de satin naturel, hacen uso de este producto como componente de sus cremas. Satin Naturel es una marca de referencia en la utilización de esta sustancia. En sus productos garantiza la no utilización de sustancias y derivados del petróleo.
El ácido hialurónico como producto facial
Si bien este producto es apropiado en toda la piel, que recordemos es el órgano de mayor extensión del organismo, es en la cara donde más se notan sus efectos. El rostro es la zona del cuerpo más expuesta a los factores externos, tanto en verano como en invierno. En verano, los rayos de sol pueden provocar graves efectos para la salud, entre ellos acelerar los procesos de deshidratación y envejecimiento.
Aplicar ácido hialurónico es una solución interesante que se vuelve más potente si se acompaña de un cepillo limpiador facial, para liberar la piel de toxinas, imperfecciones, impurezas e incluso de restos de maquillaje.
En el campo de la medicina estética, este producto ha supuesto una verdadera revolución para hacer frente a las arrugas y está sustituyendo con eficacia a la toxina botulínica, pues la inyección de ácido hialurónico a nivel intradérmico estimula y activa células de la piel incluso en personas de edad avanzada, lo que proporciona mayor volumen y estimula la formación de colágeno.
El ácido hialurónico se inyecta para eliminar arrugas en los surcos que parten de la nariz hacia los lateriales de la boca, las comisuras labiales en la línea del contorno de labios, las arrugas del entrecejo y la frente o las patas de gallo.
El uso médico del ácido hialurónico
Un paso más allá va más allá va la medicina reparadora cuando hace uso del ácido hialurónico para tratar dolencias y patologías como la artrosis y otras enfermedades degenerativas de las articulaciones. En este caso, la dinámica es similar a la de la medicina estética, realizar infiltraciones en el interior de las articulaciones para reducir el dolor y regenerar el cartílago.
En odontología se usa esta sutancia para mejorar la cicatrización y regenerar las encías y la mucosa oral. Como vemos, este producto se está volviendo imprescindible tanto en medicina estética como reparadora, también en la industria cosmética. Sus propiedades son muy beneficiosas para el organismo y los efectos son prácticamente inmediatos.