Cosas que debes considerar antes de tu operación de pecho
El pecho femenino es la zona del cuerpo de una mujer que, históricamente, ha sido síntesis de atractivo y feminidad, de bienestar corporal, atractivo y sensualidad. Freud sostenía que semejante simpatía masculina se debía, en lo elemental, al hecho de que el hombre creaba un vínculo particular con las mamas de su madre durante el período de lactancia, y a que ello se debía el interés “natural” de los hombres a esta parte particular del cuerpo femenino.
Con la llegada de la cirugía estética, en el siglo XX, el tema de los pechos no tardó mucho en convertirse en el protagonista para todas las mujeres que consideraban que sus pechos eran lo bastante pequeños como para “necesitar” este procedimiento. Eventualmente esta técnica fue refinándose, creciendo y aumentando su calidad y su vigor, siendo actualmente el tipo de cirugía estética, junto con la de la nariz, que más es utilizada por las personas para embellecerse y resultar atractivas.
Si vas a tomar esta decisión dentro de poco, además de tener en cuenta la importancia, trascendencia y finalidad de la misma, lo más importante es tener una serie de datos previos antes de realizar tu aumento de pecho.
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Asesoría y contraste
Como todo servicio o producto que va a comprarse, lo mejor antes hacer el aumento de pecho es estar correctamente asesorada. Por este motivo, sería oportuno realizar una variedad previa de consultas en diversos lugares y con muchos profesionales distintos, teniendo en consideración, en primer lugar, cuál ha sido el historial clínico de la persona, hacer estudios corporales y preguntar, y en segundo lugar, cuál es el mejor material para realizar la cirugía, una vez se haya tomado en cuenta el mencionado historial.
De esta manera se evitarán imprevistos y situaciones desagradables, además de prevenir al sitio que realizará el trabajo. Estos pequeños pasos, que parecen secundarios por simples, normalmente no son tenidos en cuenta, y la ignorancia de los mismos puede costearse muy caro para la personal.
Ten en consideración esto previamente a realizar la operación.
Se trata de un procedimiento quirúrgico
Muchas personas, al realizarse una operación de pecho, consideran el tema quirúrgico como algo accesorio o secundario, sin entender que se trata de la apertura corporal, con su consecuente y necesario subsanamiento de una herida que se realizará para operar. Es decir, no se tienen en cuenta factores que son indispensables y que en la mayor parte de los casos se ignoran de plano.
Esto implica que, como en cualquier operación quirúrgica, quien se someta a esta necesitará tiempo de descanso -reposo laboral-, atender consejos clínicos y realizar revisión de estados de curación.
La operación y sus características
La operación necesitará de sedación y ocupará un lapso de tiempo determinado, cosa que es importante tener en cuenta antes de pasar a la cirugía y de aceptarla. Por otra parte, es importante que sepas cuándo podrás estar lista para trabajar y, desde luego, cuándo podrás ver los resultados finales del procedimiento.
El aumento de senos suele ser una operación rápida, que no lleva más de 2 horas en ejecución. Entre sus características está el hecho de no precisar una hospitalización, salvo que se presente una complicación posterior por algún descuido de la paciente a la hora de atender su herida. La recuperación para poder asistir al trabajo no demora más de 7 días y los resultados finales de la misma se verán al cabo de un mes.
La sedación es local, lo que garantiza que la paciente estará cómoda y no habrá ningún tipo de malestar ni durante el procedimiento ni en las horas o días posteriores al mismo. Se trabaja con eficiencia y rapidez para que la paciente pueda incorporarse al trabajo rápidamente.
Las complicaciones
A pesar de que los posibles inconvenientes siempre tienen que ver con el tratamiento de la paciente respecto a sus heridas post operatorias, también existe una complicación puntual relativa al procedimiento, y es la llamada retracción capsular, que sucede cuando la capa de tejido conjuntivo que envuelve la prótesis se engruesa y retrae, dando una sensación de dureza en el pecho.
A pesar de que esto sucede, no sólo no es frecuente, sino que las posibilidades que aparezca son extremadamente bajas, además de ser tratable de diversas maneras. En cualquier caso, no deja de ser importante prevenir frente a este inconveniente.