El “carsharing”: una solución de movilidad para desplazarse en las grandes ciudades

El tráfico es uno de los principales problemas para las grandes ciudades. El colapso de las carreteras y el alto índice de contaminación en horas puntas parece no tener solución.

Todos necesitamos hacer uso de algún tipo de transporte para desplazarnos de un lugar a otro en una ciudad. Pero no siempre la comodidad es lo más práctico en estos casos, pues hacer uso de un vehículo propio puede generar mucho estrés y gastos innecesarios. En la actualidad existen propuestas alternativas que garantizan una mejor gestión del tiempo y economía de cada individuo.

Las grandes ciudades fomentan mucho el uso del transporte público, para ello promocionan el uso de las denominadas “tarjetas únicas”. Éstas funcionan como una tarjeta de débito, cuando se agota el saldo disponible se recargan en algún punto destinado para ello (cajeros, banca online, etc.), y permiten el libre uso de cualquier medio que opere en la urbe, como: metro, tranvía, autobús o tren.

Aunque esta solución es muy útil e interesante, hay muchos usuarios que necesitan más libertad de movimiento. Estar obligados a desplazarse en determinadas líneas y paradas no resulta práctico. Para este tipo de exigencias el mejor remedio es el “carsharing”.

El “carsharing”

El “carsharing” es el uso del coche compartido. Empresas privadas se hacen con una flota de coches eléctricos y los ponen a disposición del público en general. Para hacer uso de estos vehículos es necesario registrarse en plataformas correspondientes a cada empresa. A través de diferentes aplicaciones se gestionan el resto de los servicios.

Estos vehículos están repartidos en diferentes puntos de la ciudad, son zonas estratégicas, de esta forma los usuarios pueden hacer uso del vehículo más cercano disponible y entregarlo en la zona de destino. Este es un sistema de alquiler por tiempo de uso, como si de un alquiler de bicicletas urbanas se tratara.

No se trata de un servicio tipo Blablacar. No se comparte el viaje entre los usuarios registrados, lo que se comparte es el vehículo en sí.

Las ventajas

Las ventajas que este tipo de servicios ofrecen son muchas. La gestión del tráfico en las grandes ciudades se benefician de este tipo de alternativas, como sucede con Lovesharing, empresa de carsharing en Canarias. Gracias a estas iniciativas se solucionan problemas como el alto índice de contaminación.

La sostenibilidad del planeta es otro factor que tiene muy en cuenta el “carsharing”. El coche eléctrico no emite ningún tipo de contaminante al medio ambiente.

Las ventajas a nivel económico son muy significativas. El ahorro que supone el uso de este tipo de servicios es impresionante. Por ejemplo, tener un vehículo propio supone muchos gastos de mantenimiento. El seguro, el impuesto municipal, las inspecciones técnicas, las revisiones de mantenimiento, los cambios de ruedas y la reparación de averías son algunos de los pagos que pueden evitarse con el “carsharing”.

Aunque es cierto que hay empresas que facilitan el mantenimiento del vehículo propio, con promociones y ofertas, como es el caso del cambio de neumaticos malaga, si el uso del coche está limitado a un perímetro en concreto siempre resultará más ventajosa la opción del alquiler de coche compartido.

La flota de vehículos eléctricos, se sostiene a través de diferentes puntos de carga repartidos por toda la ciudad donde opere. Esto significa que los usuarios no tienen porqué preocuparse del combustible, ya que los vehículos se recogen con la batería cargada. Esto supone un ahorro muy significativo en la economía personal. Las subidas del coste del petróleo son problemas ajenos a los usuarios.

El ahorro del tiempo es otra de las grandes ventajas que el “carsharing” ofrece. La mayor cantidad de tiempo perdido se produce a la hora de buscar un aparcamiento. Esto en las grandes urbes puede resultar ser “una misión imposible”. Sin embargo el alquiler de coche compartido elimina este contratiempo. Los puntos de recogida y entrega de vehículos siempre están libres y disponibles para los usuarios. Además se evitan los gastos de tener que aparcar en zonas reguladas y parkings.
En la actualidad el transporte es uno de los principales problemas de las grandes ciudades. El “carsharing” es la mejor solución de movilidad, además es la solución ideal para procurar una mejor gestión del tiempo y economía personal.