¿Cómo reparar una piscina de fibra de vidrio?

La reparación de una piscina de fibra de vidrio no es cosa de niños, es una labor ardua en la que se debe conocer a detalle el proceso, herramientas y elementos que se requieren para obtener un resultado óptimo. En vista de lo delicado que es, los especialistas en este tipo de trabajos suelen cobrar una fortuna por sus servicios, no cabe duda que realizarán un trabajo formidable, pero es un dinero que podemos ahorrarnos si prestamos atención a este post.

Si tienes una piscina de fibra averiada por rajaduras o diferentes rupturas, no pienses que es un daño irreversible; enterarte como podrás recuperar esa piscina con tus propias manos sin necesidad de pagar por un servicio de reparación aunque pueda verse como un trabajo tedioso, de seguro que lo lograrás.

Reparacion de una piscina de fibra de vidrio

9 Pasos para reparar una piscina de fibra de vidrio

Para poder trabajar en una reparación de piscina de fibra, es necesario tener los conocimientos básicos. A continuación, los 9 pasos para reparar una piscina de fibra de vidrio con tus propias manos:

  1. Vaciar y secar completamente: una vez que se determina la existencia de un daño en la fibra de vidrio de la piscina, ya sea una leve rajadura o una ruptura más grande, se debe vaciar el contenedor y dejar que seque completamente. El motivo por el cual es tan importante dejar que el material seque bien, es que no se pueden aplicar los productos sobre una superficie mojada y si se hace, podría ocasionar mayores molestias.
  2. Sacar la piscina: este es un paso bastante delicado, porque al sacar la piscina de la cavidad o estructura donde está ubicada, puede agrandar el daño que ha sufrido el material, sin importar si se trata de una piscina de obra elevada o regular. Si no se trata con cuidado la piscina y llegase a golpearse, la rajadura podría convertirse en una gran ruptura del material y esto a su vez, dificulta el trabajo de reparación. En este sentido, es necesario sacar la piscina cuando ya esté todo seco (primer paso) y de ser posible, contar con el apoyo de varias personas para evitar golpearla en el proceso.
  3. Detectar todos y cada uno de los daños que presente el material: es importante detectar todos los daños que presente el material de la piscina para evitar tener que trabajar doble. Es decir, si se va a trabajar en la reparación de 3 rajaduras, la idea es erradicar el problema para que la piscina quede en perfectas condiciones y que no aparezca una avería más, cuando se creía que estaba todo listo. Se debe tener especial atención con las rajaduras más pequeñas, ya que pueden llegar a ser imperceptibles a la vista.
  4. Comprar los mejores materiales para la reparación: lo ideal sería comprar la fibra de vidrio con la resina, este es un pack de reparación que servirá para sellar las rajaduras de la piscina o incluso, para tapar agujeros. Siempre podrás usar sellador de silicona u otros adhesivos, pero no son los materiales más apropiados para garantizar un trabajo de calidad. También es necesario comprar un disco de lija gruesa.
  5. Limpiar y lijar la zona: la zona donde se va a realizar la reparación debe estar bien limpia y con una superficie regular, para que el material sellador cumpla correctamente con su función. Primero se debe secar y limpiar muy bien el lugar donde se encuentra la rajadura, luego se procede a lijar uniformemente para dejar una superficie lisa.
  6. Sellar la zona afectada: una vez que se tenga claro cuáles son los puntos en los que se va a trabajar, se procede a aplicar los materiales para la reparación. Como mencionamos en el paso 4, la mejor opción es un pack de reparación de fibra de vidrio, el cual cuenta con la fibra y la resina. Con estos materiales, aplicados por ambas caras de la rajadura, la reparación será excelente.
  7. Secar el material: luego de la aplicación del sellador, se debe esperar a que seque y se compacte con el resto de la piscina, de forma que se cree una capa hermética.
  8. Instalación: este paso es igual de delicado que la desinstalación, ya que puede volver a golpearse el material y generarse un nuevo daño.
  9. Pintar: este paso no es necesario para disfrutar de una piscina operativa, pero vaya que aporta un plus desde el punto de vista estético.

Teniendo claro estos 8 pasos fundamentales para la reparación de una piscina de fibra de vidrio, no cabe duda que el resultado será impecable tal y como las grandiosas piscinas que se pueden apreciar en este sitio web: https://piscinasonline.online/. En menos de lo que puedas imaginar, podrás disfrutar nuevamente de esos momentos de relajación a los que estabas acostumbrado antes de la avería.

Reparar piscinas de fibra de vidrio

Y lo mejor de todo es que, el resultado será el fruto de tu propio trabajo y no de la mano de un tercero que llegue a cobrarte una gran suma de dinero. Así que ahorra y conviértete en tu propia solución.

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